Producido por las productoras Fango Films, Nymbus y Mariscal Media, BRODA propone un registro de la diversidad musical joven que está sucediendo en nuestra ciudad.
Adentrándose en sonidos de groove, rap, synthwave e indie, el ciclo podrá verse a través de YouTube. Este sábado se estrena la primera sesión con Fermín Sagarduy como protagonista.
A continuación, un adelanto exclusivo de RAPTO
En un año atípico, donde las sorpresas que arreciaron no siempre fueron muy positivas, la cercanía de la primavera va presentado novedades esperanzadoras que nos hacen creer que 2020 no será un periodo para olvidar en su totalidad.
Activando una sinergia multisensorial el ciclo de sesiones musicales en vivo BRODA está llegando este sábado 15 de agosto a través de su canal de YouTube. Con una frecuencia quincenal, el material será publicado en el canal mientras que extras de entrevistas y backstage llegarán a través de IG TV.
Con sesiones dedicadas al groove, rap, synthwave, indie y otros géneros, el ciclo fue grabado en la discreción total durante los últimos meses con un equipo de producción integrado algunas de las mentes más brillantes (y diferentes) del ámbito audiovisual rosarino.
Desde las últimas semanas del invierno hasta los albores del verano 2021, BRODA promete ser el canal de encuentro entre las audiencias de la Internet y la estimulante movida rosarina que no detiene su vibración ni siquiera en el atípico contexto que atravesamos debido a la pandemia del COVID-19.
Con una crew de realizadorxs que viven la diversidad de la escena desde adentro, BRODA busca generar una mirada intimista tanto de la producción musical como de lxs artistas que la generan. “Conocemos distintas expresiones de la música emergente. De eso nos nutrimos y aprendemos”, comentan desde el corazón del estudio donde se cocina el inminente estreno.
“Entendimos que el talento está entre nosotrxs y que solo necesitamos colaborar entre todxs para lograr una construcción superadora” explican desde la producción de BRODA, expectantes de lo que está por venir.
“Decidimos comenzar a hacer sesiones con amigxs cuando nos era posible. De a poco fue tomando interés hasta que llegamos a monetizar nuestro canal, entonces vimos una oportunidad para destinarle atención al proyecto y generar el contenido que más nos interesa”, agregan.
El equipo responsable de BRODA está conformado por tres productoras audiovisuales independientes: Fango Films, Nymbus y Mariscal Media. El equipo se completa con colaboradorxs que asisten en diversos aspectos fundamentales de las sesiones como escenografía, renta de equipos, vestuario, marketing y cuestiones legales.
Mientras en Rosario el trabajo está planificado para el último semestre del 2020, otra parte del equipo está en México planificando sesiones y haciendo conexiones para desarrollar el proyecto internacionalmente.
A propósito del crecimiento del campo audiovisual santafesino de los últimos años, lxs representantes de las productoras sostienen que “desde hace unos años se viene fortaleciendo el sector, a través de políticas públicas y de la propia organización de quienes formamos parte activa del sector”. Hacen hincapié en que se trata de una construcción que se hace a diario y viene gestándose con los dedicados esfuerzos independientes y privados de la última década.
Al revisar el catálogo de producciones de Fango Films, Nymbus y Mariscal Media algo queda claro: son una parte significativa de la tremenda arremetida audiovisual que en los últimos cinco años viene cambiando la manera en que la producción local se presenta por afuera de la ciudad. Desde clips a conciertos en directo, cortos o realizaciones especiales, estas productoras vienen alzando la vara, produciendo material de excelente nivel desde una visión autoral.
Sobre la hermandad laboral que apuesta fuerte a BRODA como conexión magnética entre Rosario y el mundo, reflexionan: “se armó un grupo de trabajo sólido a partir de intereses en común preexistentes como la autonomía, el active, la creación y la música. También porque ya veníamos haciendo colaboraciones entre algunos de nosotros, y había un respeto y buena onda que ya venía de antes. Así que apenas se aprobó el protocolo audiovisual aprovechamos y armamos las Sesiones Broda con la premisa de hacer con lo que teníamos a mano. Después se fue sumando gente amiga. Lo que se genera es una red, donde los contenidos que producimos circulan y las ideas se retroalimentan”.
El estudio donde toma lugar BRODA está ubicado en el macrocentro rosarino. Allí la actividad tiene jornadas extensas y todo el team está abocado a lograr un espacio único donde lxs artistas pueden relajarse y brillar con sus canciones. Iluminación, sonido, decorado, make up y backstage. ¿Lo más lindo? Dos gatites negros que son el corazón del lugar.
Por supuesto, las grabaciones toman lugar bajo un estricto protocolo de control sanitario y prevención. Apenas ingresado al estudio, los controles se realizan como es debido: se mide la temperatura y se higienizan manos y calzado. Los barbijos se quedan en su lugar durante toda la jornada y únicamente los artistas se los quitan para tocar.
Las sesiones en vivo de BRODA funcionan bajo dos variantes, la acústica y la eléctrica. La elección queda a cargo del artista.
La sonoridad también determina la estética visual de la sesión, buscando un contraste, pero siempre manteniendo un sentir orgánico y distendido. Las sesiones acústicas son canciones grabadas en un plano secuencia con audio de aire en una locación natural. Las eléctricas (o enchufadas, como se llama de manera informal) están grabadas a dos cámaras en estudio con audio de línea.
Hasta ahora las sesiones de BRODA vienen equilibradas con registros tanto acústicos como eléctricos. En los meses venideros el público ira descubriendo diferentes colaboraciones, jams y sorpresas que permitirán otra mirada sobre ciertos músicxs.
Tiny Desk Concerts marcó un antes y un después en el consumo de sesiones en vivo de la red. El público abrazó la intimidad descontracturada del ciclo grabado en Washington DC. La diversidad de géneros fue vital para que la audiencia creciera más allá de lo estipulado en una audiencia moderna (hip) y joven con acceso a cierta información. Con una curaduría que puso el énfasis en descubrir, celebrar y acercar, el ciclo entró a las pantallas de millones de espectadorxs por todo el planeta.
House Of Strombo, desde Canadá, produjo un tendal de envíos que atravesaron generaciones, sonidos y una puesta diferente: bandas, técnicos y fans invitadxs en el living de una casa sustentable propiedad del host George Stroumboulopoulos. Luego de algunos años de mantener un buen ritmo el conductor canadiense firmó un lucrativo contrato con Apple Music para producir material para el gigante norteamericano.
Bizarrap, bueno… ¿hace falta decir algo?
Llámenlos como quieran: programas, sesiones, envíos, shows, live music series. El punto es que estas producciones se multiplican en la vastedad de la web para albergar el calor de sensibilidades distantes de la norma que impone la industria. Allí hay otro gancho interesante: nombres legendarios (Sting, Big Daddy Kane, George Clinton) y marcas de éxito internacional (Coldplay, Harry Styles, Taylor Swift) se aglutinan con sensacionales propuestas del escenario underground logrando capturar y renovar oídos. También, por supuesto, de estos ciclos supieron hacer estrellas que luego de lucirse en sus respectivas presentaciones fueron a por la conquista del mundo (y el bling).
De esa forma los ciclos se articulan como una plataforma diferente y cuasi paralela que, lejos de constituir un material alternativo del artista en cuestión, en muchos casos se convierte en el formato predilecto de lxs fans. ¿O acaso nadie prefiere alguna sesión de Tiny Desk Concerts, Bizarrap o, yendo más atrás, Sessions at West 54 o From the basement por sobre la versión oficial de estudio? La preferencia, por supuesto, no es exclusividad del público, puesto que lxs mismos artistas encuentran versiones más interesantes o relevantes por fuera del estándar de la grabación oficial. Las nuevas tecnologías supieron correr el eje de todo, eso incluye, sin dudas, la idea de la versión definitiva. Sin “postas” sacrosantas e intocables, lxs artistas van y vuelven redefiniendo su propio camino, lejos de pensar una obra como cerrada a la perpetuidad. Un ejemplo interesante es Marilina Bertoldi quien en 2019 volvió sobre su exitoso Prender un fuego con las Sesiones Saldías. De allí se desprendió un material que se volvió el favorito de lxs fans, e incluso la misma Bertoldi hizo oficial su predilección por estas sesiones, expresando que eran superiores a las del disco.
En ese sentido no es de extrañar que BRODA decida iniciar el camino con un artista como Sagarduy. Joven, talentoso y corrido del ojo público, Fermín parece una criatura de laboratorio que encuentra el éxtasis de ejecución cuasi transhumana, como una especie de antihéroe cronenbergiano que tiene el deseo enfocado en crear a un costado de las exigencias y necesidades de la industria actual. Sagarduy vibra a su propio tiempo, al igual que BRODA.
This is fine (escribimos esto en su momento), su LP publicado por Quema Discos algunos meses atrás, llegó de manera silenciosa sin ningún tipo de anuncio de prensa y bien distante de cualquier opereta hypeadora. Dentro de un contexto que imposibilitaba la presentación en vivo del material, Sagarduy optó por meterse otra vez en su laboratorio para seguir produciendo otra música. Material propio o material ajeno. Con las sesiones de BRODA el cantautor y productor despliega su magia, dejando saber que el círculo de intimidad le sienta bien, casi ideal, prendiéndose fuego a solas, utilizando la extensión de su cuerpo y los instrumentos como herramientas fundamentales.
En un contexto donde la pirotecnia visual ataca desde todos los ángulos posibles. La idea de generar un contexto de intimidad que se corra de la velocidad que se apropió de todos los dispositivos es casi salvadora. No hace falta reinventar la rueda para obtener una idea diferente. Tampoco hay que correr tras una liebre revolucionaria. Quizás, simplemente, apartarse del vértigo sea suficiente.
En unas pocas horas nuestra ciudad lanzará al espacio exterior BRODA, un ciclo musical producido ciento por ciento en Rosario y enfocado en artistas que mes a mes sorprenden con un flujo musical que respira diversidad, energía y renovación.
En la formalidad BRODA son sesiones audiovisuales en clave intimistas e hipnóticas. Sin embargo, BRODA parece ser un satélite rosarino que se eleva para conectar nuestras expresiones más frescas con la posibilidad infinita de la Internet. De Rosario para el mundo repleto de una data renovadora y diferente.
BRODA surge desde la necesidad de conocer nueva música. Esa necesidad funciona de forma bidireccional: la audiencia busca música nueva, pero la música nueva, todavía en pleno desarrollo, tiene la apasionante aventura de descubrir quién será su público. ¿Quién está del otro lado? ¿Qué genera el click de un play? ¿Curiosidad, pasión o mero entretenimiento? ¿Cuáles son las coordinadas de quién está disfrutando? ¿De dónde viene el artista que está tocando? Sin límites jurisdiccionales o fronteras geográficas, BRODA es una cápsula viva de nuestra cultura lista para ser descubierta por un público difícil de predecir.
En la era de la información y la diversidad es inútil segmentar las audiencias. Más atractivo (e irresistible) es imaginar la convergencia que el público de BRODA irá desarrollando entrega tras entrega. Fermín Sagarduy, Shanti, Ani Bookx, Mauro Barreca y otrxs artistas (que no vamos a spoilear porque no hay nada más aburrido que una sorpresa anunciada) serán parte de un ciclo que aglutina y potencia la diversidad de lenguajes estéticos mutantes. Las sesiones generan información nueva, claro, pero que además está en plena evolución. Ninguna canción es similar al registro previamente conocido. BRODA propone avanzar; adentrarse en nuevas facetas. Además, entre lo diferente de cada aproximación/versión, la carga extra de zapada, de improvisación lúdica y adrenalínica entre ensambles especialmente preparados, va engendrando material nunca antes escuchado. Allí, el crédito es para todas las partes: BRODA propone y abre las puertas de su sesión, pero lxs músicxs involucradxs se entregan con todo, permitiéndose un riesgo potenciador, un fuego amigo que sale de interactuar con otros talentos.
A partir de este sábado BRODA despega para mostrar otros mundos. Son esos mundos que están ocurriendo en nuestra ciudad y que en el presente contexto se sienten tan cerca, pero aún así tan lejos. Se prometen aventuras de alto vuelo y una perspectiva diferente de lo que está ocurriendo en nuestros días tan atípicos y necesitados de fuertes dosis de vibra fresca y estimulante.
Lucas Canalda